La Ley de Datos: un pilar clave de la Estrategia Europea para los datos
Opinión y estudios 24/03/2022
La propuesta de Reglamento sobre normas armonizadas sobre el acceso y el uso equitativo de los datos, lo que se conoce como Ley de datos, fue adoptada por la Comisión el pasado 23 de febrero de 2022.
La Estrategia Europea de Datos tiene como objetivo principal la creación de un mercado único de datos que debe garantizar la competitividad mundial y la soberanía de los datos de Europa. Por lo tanto, la mencionada estrategia busca afianzar aún más el liderazgo de la UE en la economía mundial de datos y está centrada en priorizar a las personas en el desarrollo de la tecnología, así como en defender y promover los valores y derechos europeos en el mundo digital.
Asimismo, cabe destacar que la Ley de Datos complementa el Reglamento de Gobernanza de Datos, propuesto en noviembre de 2020, que permitirá a los usuarios mantener el control de sus datos y fomentará la creación de espacios de datos europeos comunes en sectores cruciales. Estos sectores incluyen la salud, el medio ambiente, la energía, la agricultura, la movilidad, las finanzas, la fabricación, la administración pública y las habilidades.
Si bien el Reglamento de Gobernanza de Datos crea los procesos y estructuras para facilitar los datos, es la Ley de Datos la que establece quien puede crear valor a partir de los datos y en qué condiciones. Así, considerada como la iniciativa emblemática de la Estrategia Europea de Datos, la Ley de Datos tiene como objetivo proponer medidas para crear una economía de datos justa garantizando el acceso y el uso de los datos, incluso en situaciones de empresa a empresa y de empresa a gobierno. La iniciativa no alteraría la legislación de protección de datos y trataría de preservar los incentivos en la generación de datos. En el marco de esta iniciativa, también está prevista una revisión de la Directiva 96/9/CE relativa a la protección jurídica de las bases de datos con el fin de garantizar la pertinencia continua para la economía de los datos.
Así, la Ley de Datos pondrá a disposición más datos en beneficio de las empresas, los ciudadanos y las AAPP a través de un conjunto de medidas destinadas a aumentar la seguridad jurídica de las empresas y los consumidores que generan datos, y a evitar el abuso de los desequilibrios contractuales que dificultan el intercambio justo de datos, quedando las pymes protegidas contra las cláusulas contractuales abusivas. Por otro lado, la Ley de Datos favorecerá que los organismos del sector público accedan y utilicen los datos en poder del sector privado que sean necesarios para fines específicos de interés público al mismo tiempo que establecerá las condiciones marco adecuadas para que los clientes cambien efectivamente entre diferentes proveedores de servicios de procesamiento de datos para desbloquear el mercado de la nube de la UE.
Para finalizar, es preciso señalar que, del 3 de junio al 3 de septiembre de 2021, se desarrolló la consulta pública abierta sobre la Ley de Datos con el objetivo de conocer la opinión de las partes interesadas, incluidos ciudadanos y empresas, sobre las diferentes medidas relativas a la mencionada ley. La mayoría de los encuestados consideraron que es necesario actuar a escala nacional o europea para el intercambio de datos entre empresas y administraciones públicas para el interés público, especialmente para las emergencias y la gestión de crisis, la prevención y la resiliencia. Las respuestas mostraron que, si bien las empresas se dedican al intercambio de datos, las transacciones de datos siguen estando frenadas por numerosos obstáculos de naturaleza técnica o legal.